Grandes Jugadores: Cap. I - Renato Portaluppi

Inauguro esta sección con un gran delantero brasileño de la década del 80 y principios de los 90, el famoso y nunca bien ponderado Renato Portaluppi, más conocido como Renato Gaúcho.
Surgido de las divisiones inferiores del Club Bento Gonçalves de Río Grande do Sul,en el año 1982 debutó en la primera del Gremio de Porto Alegre club que compro su pase, al siguiente año fue una de las figuras de su equipo que conquistó la Copa Libertadores de América, ganándole la final al Peñarol de Uruguay y luego la Copa Intercontinental ante el Hamburgo de Alemania. En dicha final, anotó los dos goles del Gremio que ganó por 2 a 1 y fue elegido como el jugador mas valioso del partido. Por ese logro, Renato es considerado el máximo ídolo en la historia del club.
En el año 1986 fue convocado por Tele Santana para jugar el mundial de México, pero un confuso episodio hizo que se peleara con el DT y fuera desafectado de la lista.
Al año siguiente fue contratado por el Flamengo, donde tuvo como compañeros a Zico y Bebeto entre otros. Ese año el Flamengo gana el Campeonato Brasilero y Renato es una de sus grandes figuras, siendo elegido el mejor jugador del campeonato.
En 1988 fue vendido a la Roma donde tuvo un paso sin pena ni gloria volviendo al Fla al año siguiente.
Formó parte del plantel brasilero que jugó el mundial de Italia 90, pero era suplente y jugó muy poco.
En 1991 pasó del Flamengo al Botafogo y protagonizó un curioso episodio, resulta que justamente estos dos equipos jugaron las finales del campeonato Brasilero de 1992. Flamengo ganó la primera final por 3 a 0 y al día siguiente escracharon al amigo Renato en el festejo de sus ex compañeros, resultado, le rescindieron el contrato y Botafogo apenas empató el partido de vuelta.
A mediados de 1992 firmo con el Cruzeiro y ese año ganó la Supercopa con el equipo Mineiro.
Despues de eso, jugo alternadamente en Flamengo, Atlético Mineiro y Fluminense, hasta que en 1998 se retiró jugando para el humilde Bangú de Rio de Janeiro.
Un gran delantero brasilero, exponente del futbol alegre y descontracturado. Sobre todo un gran personaje

Cancha chica, corazón grande

Paso una nueva fecha, que prometía mucho y entregó muy poco. Partidos trabados, mucha marca en el medio, mucho miedo a perder, pocas situaciones de riesgo y por ende pocos goles.
Dentro de esa mediocridad generalizada, Estudiantes sacó ventaja de su juego compacto y se aprovecho de pésimo presente de su clásico rival. No le sobró nada al pincha, es más en el primer tiempo se le pudo haber complicado muchisimo el partido. En la misma jugada, con el partido 1 a 0 a su favor, le cobran penal en contra y se queda con 10 jugadores. Pero bueno, por su fortuna y la impericia de Fede Dominguez se fueron al descanso ganando. En el 2º tiempo parecía que se lo daba vuelta GyE, lo empata el mismo Dominguez y le echan otro al equipo de Sensini, se le venia la noche. Pero enseguida, aprovechando la buena pegada de Benitez, Maggiolo(con el inestimable aporte de ese pésimo arquero que es Kletnicki) puso el 2 a 1 y Gimnasia se desmoronó, fin del partido y punta en soledad para el Pincha. Es justicia.
En una nueva edición del clásico más desparejo del fútbol argentino, Huracán y San Lorenzo se enfrentaron en la cancha de Argentinos, imaginense lo que fue ese partido que lo más importante estuvo centrado en la discusión sobre si en el Estadio Diego A. Maradona se puede practicar buen fútbol o no. A ver, si un equipo se planta en una cancha chica con 4 defensores cuyos laterales nunca suben por sorpresa al ataque y con un doble 5 defensivo que no aporta mucho en ofensiva, y encima se equivocan los caminos constantemente.... la culpa no es de la cancha. Yo creo que la forma correcta de jugar en un campo de juego menor al común de los estadios de los equipos de primera, es abriendo la cancha, haciendo circular la pelota, tratar de llegar hasta el fondo, desbordar. Si en una cancha chica se intenta entrar tocando por el medio o con pelotazos frontales, contra una defensa bien parada no hay nada que hacer. En ese error cayó San Lorenzo el domingo, es el mismo error en el que caen todos los equipos con aspiraciones que van de visita a Argentinos, es el mismo error en el que cayó Velez el sábado y le costó el partido.
Criticar el tamaño de la cancha no es una escusa válida para explicar una floja producción, ese tiempo lo podrían aprovechar para analizar como se debe jugar para contrarrestar la ventaja que tiene el equipo local en ese tipo de canchas, ellos lo hacen. Así Argentinos principalmente y Huracán en menor medida han sabido sacar ventajas de jugar como locales en esa cancha. Lo importante es encontrar la forma de superarlos, que seguramente existe.
No es un análisis de la fecha en si, sino destacar los dos extremos que se dieron en los partidos de este fin de semana. Dos clásicos, uno emocionante, cambiante y otro chato, trabado y más hablado que jugado.

Sueltos de lengua

Ante esta nueva aparición mediática de un jugador, haciendo declaraciones en contra de los seguidores del equipo donde juega, y luego de un debate muy interesante en La Redó! en el cual no se llegó a ninguna conclusión como es habitual. Me doy la licencia de reflexionar sobre esta nueva costumbre de los jugadores del fútbol argentino.

Digo yo, que se les dio ahora por enfrentarse con sus propios hinchas? Que sentido le ven a responder agresivamente a las críticas recibidas? que creen ganar con eso? Por que eso antes no pasaba casi nunca y ahora es cada vez más común?

Después de esta introducción digna de vale chistar, trataré de contestar esos interrogantes.
Es sabido que cada vez son menos los futbolistas que juegan con amor por la camiseta que visten, que por la famosa y bendita globalización los jugadores medianamente destacados cada vez duran menos en sus equipos y por ello no logran identificarse con su club de origen, lo que hace de eso un circulo de causas y consecuencias que lo único que deja en claro es que la carrera de un futbolista es demasiado corta y hay que hacer mucha plata. Yo creo que principalmente por eso se está dando esto cada vez con más frecuencia. Al jugador ya no le importa si la gente lo quiere o no, total a fin de campeonato "lo venden" y listo, a otra cosa.
Por otro lado, se sabe que las barra bravas son un gran negocio dentro del meganegocio que es el fútbol. Que estos personajes responden a intereses políticos y no a la pasión genuina del hincha que ellos dicen tener y que en verdad de eso tienen poco y nada. Los jugadores lo saben y en muchos casos son participes y complices de estos grupos, que así como les van a pedir plata a ellos para alentarlos, también pueden recibir plata de terceros interesados para "tirarles la gente en contra". Lo que tendrían que saber diferenciar los futbolistas es cuando las criticas e insultos son espontáneos y parten de los verdaderos hinchas (el tema de si el hincha tiene derecho o no a insultar es otro cantar y en ese caso las opiniones varían mucho) y cuando es algo premeditado y mal intencionado.
Yendo al caso particular de Ahumada, creo que le pifió feo. Lo primero que tiene que hacer un plantel que pasa por una situación como la de River el jueves pasado, es demostrar una fuerte autocrítica, hacerla pública y solo después de eso tendrían derecho a poder recriminar alguna actitud por parte de los hinchas. En este caso, no solo eso no se hizo, sino que se tomó una postura soberbia y encima se ofendieron por lo que algunos pocos simpatizantes hicieron el domingo pasado en el partido contra Gimnasia.
Esto antes no pasaba nunca, porque en cuanto un futbolista amagaba a salir a hacer una declaración de ese tipo, cosa que ni se les cruzaba por la cabeza, le bajaban linea desde los dirigentes hasta sus propios compañeros, sobre todo los de más experiencia.

Yo particularmente creo que actitudes y declaraciones como estas, no ayudan en nada y lo único que hacen es empeorar las cosas. Y que más allá de quien las haga, si desde la dirigencia, cuerpo técnico o desde el mismo plantel no salen a poner paños fríos a la situación, yo lo tomo como un pensamiento generalizado, lo que lo haría mucho más grave.
Así que mejor ponganse a jugar y a dar vuelta la situación que de esa forma los hinchas no los van a criticar y no van a hacer falta este tipo de debates.

6 Equipos, 5 Fechas, 1 Campeón

Se jugó la 14º fecha de torneo Clausura 2008 y por los resultados que se dieron, estamos de cara a una definición emocionante ya que quedan solo 5 fechas por jugar y tenemos 6 equipos en una diferencia de 4 puntos.
La fecha que viene creo que va a clarificar mucho las cosas ya que todos los equipos que están peleando arriba juegan partidos entre si, o sus respectivos clásicos y/o partidos importantes. Me parece que después de esta fecha va a estar más claro quienes van a pelear el torneo hasta el final y quienes se quedarán en buenas intenciones.

Analizando un poco lo que pasó en esta última fecha, creo que el que mejor parado quedó fue Estudiantes. El Pincha ganó un partido clave, que suele perder y quedó como uno de los punteros. Se le viene el clásico contra un devaluadisimo Gimnasia, a priori es ganable, pero bueno, clásicos son clásicos y cualquier cosa puede pasar. Los otros dos que quedaron bien parados luego de esta fecha son Velez e Independiente y están cerca. El Fortín no viene jugando bien, pero lleva tres triunfos al hilo y esta a solo 3 puntos de la punta, en la 15º va de visita al siempre difícil Diego Maradona. El Rojo lleva 5 victorias consecutivas, se cargó a San Lorenzo que era uno de los punteros y la próxima fecha chocará contra River, el otro puntero. Partido clave para el equipo de Borghi ya que de perder quedaría muy lejos de la punta. Para mi la gran contra que tiene el Rojo es que tiene el fixture más complicado.
Párrafo aparte para este River puntero, en mi opinión es el que más chances tiene de ganar el torneo, es más me animo a decir que si no lo baja Independiente, no lo baja nadie. El rival más importante que tiene River, después del Rojo, es el mismo River. Si logra superar el trauma post eliminación de la Copa, es el máximo candidato.
Los dos que quedan, San Lorenzo y Boca, están superditados a como les vaya en los cuartos de final de la Libertadores. Si pasan de ronda, creo que se bajarán solos del torneo porque ya a esta instancia no hay margen de error y sabido es que los dos priorizan la copa. El CASLA juega el clásico barrial contra Huracán y Boca recibe al muy alicaído Racing.

Así las cosas creo que la fecha 15 va a ser bisagra en este torneo, no definirá nada, pero dejará un panorama mucho más claro.

Ser DT hoy

Hace un rato terminó el partido entre River y San Lorenzo por los octavos de final de la Copa Libertadores y me vino a la mente algo que vengo pensando hace algún tiempo. Es una inquietud que se da preponderantemente al observar los partidos del campeonato argentino y el desempeño de los equipos que en el participan.

Estoy cada vez mas convencido que la importancia de un director técnico en un equipo es cada vez menor. Me refiero a la dirección táctica del equipo, a la forma de hacerlo jugar. Obviamente que tiene cierta importancia, pero a lo que voy es que en esta época de futbolistas atletas y mas preocupados por el dinero que por la gloria deportiva, es mucho mas valioso un técnico capaz de armar y mantener un grupo unido y motivado, que un DT de grandes conocimientos tácticos.
Ramón Diaz es uno de los exponentes claros de esta tendencia que vengo observando, es un técnico que quizá no tenga una gran capacidad para plantar equipos tácticamente innovadores, pero tiene una gran virtud que es la del convencimiento y la motivación. Obviamente esto tiene que estar acompañado de tener un buen plantel, con jugadores que puedan marcar diferencias, ya sea en lo futbolistico o en lo físico.
Carlos Bianchi es otro caso dentro de esta corriente, un tipo que plantea equipos simples, donde cada uno sabe lo que debe hacer, un par de conceptos claros y nada màs. Lo demàs es convencimiento y motivación, mantiene a todo el plantel compenetrado en lo que tiene que hacer. Entra uno, sale otro y el equipo sigue igual.
Y hay algunos casos más que se han dado en estos últimos años, como Miguel Russo, Manuel Pellegrini o Ramón Cabrero.

Yo creo, estoy cada vez más convencido que hoy por hoy, esto es así. Obviamente que nadie tiene la receta para ganar siempre, pero hay algunos que al menos parecen tener bastante claro lo que tienen que hacer para lograrlo.

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